Mcleo Ganj, Buddha Smile (III Visit to "Lotus Bearer")

Tenzin Gyatso, o simplemente Kundun (la Presencia), o Gyalwa Rinpoché (Precioso Vencedor), o el XIV Dalái Lama (océano de sabiduría), dijo en cierta ocasión: “Considero una sonrisa como algo único en un ser humano. Una sonrisa es también una poderosa comunicación. Una sonrisa sincera es la expresión perfecta del amor y la compasión humanas”. “Si alguna vez no te dan la sonrisa esperada, sé generoso y da la tuya. Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa, como aquel que no sabe sonreír a los demás”. Dejaba para ésta 3ª y última entrega lo mejor de mi experiencia en Mcleo, la que da nombre a esta trilogía que forma parte de mi primer viaje a La India, La sonrisa del Buda; además, os daré un par de consejos o indicaciones para vivir una experiencia (al menos para mí lo fue) inolvidable, mi encuentro con el Dalai Lama. El protagonista de este rincón es un hombre tan cercano y sencillo que sorprende, a pesar de ser jefe de gobierno de su país (Tíbet) desde los 18 años, en 1953 (aunque ejerce en el exilio aquí en India desde 1959. En 1963 se promulgó una constitución democrática basada en la Declaración Universal de Derechos Humanos y se estableció aquí, en la pequeña Lhasa, “La Capital” de unos 130.000 exiliados tibetanos que viven en India, con este hombre a la cabeza). A pesar de haber ganado en 1989 el Nobel de la Paz, de haber recibido decenas de doctorados honoris causa, ser miembro de honor del Comité de la Coordinación internacional de la no violencia y la Paz, haber recibido la Medalla de Oro (en 2007 del Congreso de EEUU) y un montón de condecoraciones más, éste hombre transmite una humildad con su mirada que le engrandece aún más si cabe. A los pocos días de llegar a Mcleo, uno de mis amigos (a los que agradezco infinitamente haberme picado para ir a India), se acercó una tarde hasta nuestro apartamento muy excitado, diciendo que había oído por el pueblo que el día siguiente era el cumpleaños del Dalai Lama y que se le podía visitar. Enseguida nos contagió su entusiasmo y nerviosismo, y nos empezamos a mover por el pueblo a ver qué se podía hacer para verle; tras informarnos lo que pudimos (hay un poco de secretismo con el tema, no son muchos los guiris que yo vi allí) y comprobar que ya era tarde para encontrar la oficina abierta, decidimos madrugar el día siguiente y estar en la oficina muy temprano. En el mismo pueblo se encuentra la oficina de la secretaría de Dalai, allí nos dieron (presentando el pasaporte) una especie de visado para asistir a la recepción pública que el Dalai hace por su cumpleaños. La espera aunque larga, tenía mucho que ofrecer, la mayoría de la gente que estaba esperando eran tibetanos, de fondo el sonido gutural de los cánticos de los monjes bañaba por completo la estancia, no sé cuantas personas había, pero todos tenían algo, un rayo de esperanza, una ilusión en la mirada. Aunque ya estaba colocada en otro rincón de Dharamsala, vuelvo a colgar la foto del señor tibetano, porque es precisamente de este momento de espera. El hombre estaba junto a su mujer, y los dos, hombro con hombro miraban hacia la entrada con la esperanza de quien reencuentra a un familiar muy querido que ha estado en la distancia, o simplemente abatidos, junto a tantos de sus compatriotas que como él puede que nunca vuelvan a ver libre su patria. Pero la visita al Dalai representa para ellos algo muy especial, la esperanza, y todos le profesan un respeto como jefe de estado y sobre todo, como guía espiritual. Los budistas tibetanos consideran que los Dalai Lamas son emanaciones del Buda , pero que no son Buda, sino Bodhisattva (alguien embarcado en el camino del Buda de manera significativa, en la búsqueda de la suprema iluminación), es como se conoce a Buda en el tiempo previo a su iluminación; o sea que el Dalai está en el camino de ser El Buda. Venidos de toda India, en este día todos y cada uno de los tibetanos que lo desea puede acercarse a estrechar las manos de Dalai, y algún que otro guiri también tenemos ese gran privilegio. Después de un rato, tras el deleite de la espera contemplativa, la cola avanzó hasta llegar mi turno, y de pronto me vi allí frente un hombre que resplandecía tras una gran sonrisa y una mirada de paz absoluta .En aquel instante, coge entre las suyas mis manos, y me mira de cerca a los ojos (que no han perdido aún la hermosa sonrisa, robando al instante la mía). Se para entonces el tiempo un instante, mientras me deslumbra su alma (que resplandece en mi mente totalmente blanca); nuestras manos se sueltan porque le hace gracia mi piercing y juguetea con el cristal rosa que sobresale bajo mi boca, hasta que rompe el silencio una divertida carcajada, sin apartar mis ojos de los suyos me uno a su alborozo. Veo de pronto la inocencia de un niño, y la luz de su mirada, que efectivamente contiene un océano de sabiduría; su sonrisa, una tierra de paz. Qué momento! Antes de irme vuelvo a coger sus manos entregándole una mirada de: -“gracias”, y me marcho con su regalo, un pequeño instante para la eternidad. Cuanto por aprender enseña cada viaje. Las experiencias vividas son lo único que perduran , y ésta que me regaló el destino la recordaré siempre. “No tiene sentido estar apegado exclusivamente a esta vida, ya que por muy larga que sea, no podemos vivir más de determinada cantidad de años. Por eso no importa cuánta riqueza o recursos acumulemos en esta vida. En ese momento no nos servirán de nada”. Tenzin Gyatso (XIV Dalái Lama) Paz y Felicidad para todos. Os dejo aquí todos los datos de la secretaría del Dalai, por si alguien se anima a probar. Oficina de S S el Dalai Lama, P.O. Mcleod Ganj, Dharamsala (H.P.) - 176219, INDIA Tel: [91-(0) 1892] 221343/221879, Fax: [91-(0) 1892] 221813 E-mail: Http://www.Dalailama.Com/ La Oficina del Dalai Lama 65.19.137.2 = = = tlc@dalailama.Com 65.19.137.2 = tntaklha@dalailama.Com 65.19.137.2 = = = tntaklha@dalailama.Com 65.19.137.2 = chhimerigzing@dalailama. 65.19.137.2 = = = chhimerigzing@dalailama.Com

Tenzin Gyatso, or just Kundun (Presence), or Gyalwa Rinpoche (Precious Victor) or the XIV Dalai Lama (Ocean of Wisdom), once said: "I think a smile as unique in a human. A smile is also a powerful communication. A sincere smile is the perfect expression of love and human compassion. " "If you ever do not give the expected smile, be generous and give yours. Because nobody has much need of a smile, as one who does not know how to smile to others. " He left for this 3rd and final installment the best of my experience in Mcleo, which gives its name to this trilogy that is part of my first trip to India, The Buddha smile; also give you a few tips or guidelines to live experience (at least for me it was) unforgettable, my meeting with the Dalai Lama. The protagonist of this corner is a man nearly as easy to surprise, despite being head of government of their country (Tibet) since age 18, in 1953 (though exercised in exile here in India since 1959. In 1963 promulgated a democratic constitution based on the Universal Declaration of Human Rights was established here in the Little Lhasa, "The Capital" of some 130,000 Tibetan exiles living in India, with the man at the top). Despite having won the 1989 Nobel Peace Prize, having received dozens of honorary doctorates, honorary membership of the International Coordination Committee of non-violence and peace, having received the Gold Medal (in 2007 U.S. Congress) and plenty of decorations more, it conveys a humble man with his look that enhances even further. A few days after arriving in Mcleo, one of my friends (who am infinitely grateful stung me to go to India), came to our apartment one evening very excited, saying he had heard from the people the next day was the Dalai Lama's birthday and that he could visit. We soon caught his enthusiasm and excitement, and we started to move through the town to see what could be done to see him after what we could tell (there is a bit of secrecy to the topic, not many touristy I saw there) and check that it was too late to find the office open, we decided to get up early the next day and be in the office early. In the village is located the office of the Dalai secretariat, there we got (presenting the passport) a kind of visa to attend the public reception the Dalai ago for his birthday. The wait even longer, had much to offer, most of the people waiting were Tibetans, background the guttural chants of the monks completely bathed the room, do not know how many people there were, but they all had something, a ray of hope, an illusion in his eyes. Although he was placed in another corner of Dharamsala, back to hang the picture of Mr. Tibetan, it is precisely in this moment of waiting. The man was with his wife, and the two, side by side looking towards the entrance hoping who rediscovers a beloved family that has been in the distance, or simply killed, along with many of his compatriots as he may never again see their homeland free. But the visit to the Dalai represents for them something very special, hope, and we all profess a respect as head of state and above all, as a spiritual guide. Tibetan Buddhists believe the Dalai Lamas are emanations of the Buddha, but are not Buddha but Bodhisattva (someone embarked on the path of Buddha significantly, in the search for the supreme enlightenment), is as known buddha in time prior to his enlightenment, that is that the Dalai is on the way to becoming the Buddha. Coming from all over India, on this day each and every one of the Tibetans who wish can approach Dalai shake hands, and some other foreigner also have that great privilege. After a while, after the delight of waiting contemplative, the line moved until my turn, and I was suddenly there in front of a man who shone after a big smile and a look of absolute peace. At that moment, caught between the hers my hands, and I look closely at the eyes (which have not yet lost the beautiful smile, instantly stealing mine). Then time was for a moment, while his soul baffles me (that shines in my mind all white) because our hands are released amused my piercing and plays with pink glass sticking in my mouth, until he breaks the silence a funny laugh, never taking my eyes from his I join your joy. Suddenly I see the innocence of a child, and the light in his eyes, which effectively contains an ocean of wisdom, his smile, a land of peace. What a moment! Before I go back to get his hands giving him a look of: - "thank you", and I go with her gift, a small moment for eternity. The to learn teaches each trip. The experiences are all that remain, and this fate gave me remember it forever. "No sense being attached solely to this life, and that however long it may be, can not live more than a certain number of years. So no matter how much wealth or resources accumulate in this life. At that time we will come to nothing. " Tenzin Gyatso (Dalai Lama XIV) Peace and Happiness to all. I leave here every data Dalai secretariat, if anyone dares to try. Office of HH the Dalai Lama, PO Mcleod Ganj, Dharamsala (HP) - 176219, INDIA Tel: [91 - (0) 1892] 221343/221879, Fax: [91 - (0) 1892] 221813 E-mail: Http: / / www.Dalailama.Com/ The Office of the Dalai Lama tlc@dalailama.Com 65.19.137.2 65.19.137.2 === === = tntaklha@dalailama.Com 65.19.137.2 tntaklha@dalailama.Com 65.19.137.2 = chhimerigzing @ dalailama. 65.19.137.2 === chhimerigzing@dalailama.Com